El Ministerio de Salud nacional desaconsejó el uso de pirotecnia durante las fiestas para minimizar al máximo posible la ocurrencia de accidentes.
“La pirotecnia no divierte: lastima, mutila y genera discapacidad”, dijo el ministro Juan Manzur, quien pidió una vez más que “la familia argentina se abstenga de usar artefactos pirotécnicos, que generan luces que duran segundos y pueden provocar lesiones para toda la vida".
El funcionario instó a "decirle no" al uso de cohetes y fuegos artificiales, ya que "la pirotecnia segura no existe y la única manera de prevenir accidentes es no encenderla".
“Los que hemos hecho guardia en los hospitales durante las fiestas vimos cómo un momento de felicidad y armonía esperado durante todo el año se arruina cuando una criatura se hiere”, remarcó.
Según estimaciones de los efectores públicos nacionales, un gran porcentaje de los heridos graves por la manipulación de pirotecnia son niños de entre 5 y 14 años. “Pido a los adultos que reflexionen con serenidad para tomar la provechosa decisión de prescindir de la pirotecnia para despedir este 2013”,
La utilización de cohetes y fuegos artificiales puede ocasionar gravísimos daños, tales como quemaduras, problemas auditivos y lesiones oculares, que en muchos casos son irreversibles.
Las zonas del cuerpo más afectadas en los accidentes por pirotecnia son las manos (40%), los ojos (20%), y la cabeza o cara (20%), de acuerdo a datos recabados por el Programa de Salud Ocular y Prevención de la Ceguera de la cartera sanitaria.
Desde el Ministerio de Salud bonaerense recomendaron, en caso de utilizar pirotecnia en las fiestas, que se mantenga a los niños alejados y no se apunte a otras personas u hogares.
"Debe comprarse siempre pirotecnia autorizada ("Autorizado por el Renar") y debe ser manejada únicamente por adultos con protección ocular y ropa no inflamable", precisaron desde esa cartera sanitaria y agregaron que "los artefactos no deben exponerse a fuentes de calor".
Además indicaron que hay que leer y respetar las indicaciones de uso de cada elemento y que, si un artefacto no explota, jamás se debe tocar, sino apagarlo con abundante agua y mantenerse lejos.
En caso de quemaduras, se recomienda lavar la zona con agua fría y cubrirla con telas limpias y húmedas; retirar anillos, pulseras u otros elementos que causen presión sobre el área quemada, y trasladar al herido al hospital o centro asistencial más cercano.
Los centros de asistencia en Ciudad y Provincia de Buenos Aires son los hospitales Nacional Alejandro Posadas (Presidente Illia y Marconi, El Palomar); de pediatría Juan Garrahan (Pichincha 1890); Oftalmológico Santa Lucía (Avenida San Juan 2021), y el Hospital de Quemados (Pedro Goyena 369).